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El Ayuntamiento informa por parte de los usuarios que la empresa Vitrasa dejará de prestar servicio en la línea 28 a partir del próximo lunes 24 de febrero.
La alcaldesa de Redondela, Digna Rivas, lamenta tener que informarse a los vecinos de Redondela, usuarios del servicio de transporte interurbano, del cambio de servicio de la línea 28 que actualmente opera Vitrasa.
El pasado viernes, los usuarios de la línea 28 de Vitrasa se sorprendieron al ser informados en el propio autobús de que el servicio de su empresa iba a quedar interrumpido a partir del próximo lunes, con una nueva empresa adjudicataria, Autos González, nueva prestadora del servicio desde aquel fecha.
El alcalde considera que la Xunta de Galicia vuelve a faltar al respeto al barrio de Redondela, al no haberles informado con suficiente antelación de la variación que se iba a producir en las líneas afectadas, un cambio de servicio que supone un gran perjuicio para estos usuarios que toman estas líneas diariamente para desplazarse a su trabajo o centros docentes.
Ante esta situación, el alcalde y el equipo de Gobierno quieren trasladar un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía. La Alcaldía ya ha solicitado al servicio de movilidad de la Xunta de Galicia una reunión de urgencia para aclarar las condiciones de este servicio, información que será transmitida a los vecinos de las parroquias afectadas.
El Ayuntamiento de Redondela ya había presentado al anteproyecto una serie de alegaciones, como la creación de nuevas vías de conexión entre Vigo-Redondela-Pontevedra sin paradas intermedias para conseguir una comunicación directa y rápida entre los 3 municipios, incrementar las expediciones propuestas en el fin de semana, y mejorar los casos de paradas existentes con déficit, como puede ser el caso de las paradas en Alto y el Colegio de Censantes, Soutoxuste, O Pereiro o Cedeira.
Otra de las quejas que ya se habían manifestado en aquellas alegaciones había sido las deficiencias de este anteproyecto en cuanto a la falta de información mínima en las paradas y a bordo de los vehículos, o aspectos medioambientales como el tipo de vehículos.
Todas estas acusaciones fueron desmentidas por la Xunta de Galicia, comunicadas en carta dirigida al Consell el pasado enero de 2020.
